La última guía de bienestar pre-boda
Es oficial: ¡por fin te has comprometido! Este es un momento increíble y emocionante en tu vida, pero cuando viste por primera vez el anuncio del compromiso, podrías haber sentido un poco de pánico.
Me veo TERRIBLE, podrías haber pensado. ¿Cómo se supone que voy a estar guapísima el día de mi boda?
Puede que te hayas apresurado a entrar en Internet, buscando chismes que te ayuden a ponerte en forma para tu día especial. Es un movimiento inteligente; hay guías para ayudarte a estar "listo para la boda" en todo internet. Pero el asunto es el siguiente: el cuerpo de cada persona es diferente, y no existe un plan de salud y de acondicionamiento físico que funcione perfectamente para todos.
¿Significa esto que es imposible estar más saludable para tu boda? ¡Claro que no! Hoy, hablemos de algunas cosas simples que ayudarán a cualquier novia o novio a verse y sentirse mejor en el gran día.
Empiece a cambiar sus hábitos pronto
Cuando empiezas a planear tu boda, puede parecer que hay mucho que hacer en muy poco tiempo. ¿Cómo se supone que vas a planear el mayor evento de tu vida, mantenerte al día con tus responsabilidades diarias, y ponerte en forma y saludable? Hay un simple truco que te ayudará a hacer todo esto manejable: empieza pronto y tómatelo con calma.
El compromiso promedio dura 13 meses, alrededor de 395 días. ¿Y adivina qué? ¡Sólo se necesitan unos 66 días para cambiar o crear un hábito! Esto significa que tienes mucho tiempo para trabajar hacia hábitos más saludables. Empieza con una cosa (beber más agua, subir las escaleras en el trabajo, no te desplaces por Instagram hasta la 1 de la madrugada) y trabaja en ello hasta que sea algo natural. Entonces, ¡elijan un nuevo hábito y empiecen de nuevo! Si empiezas este proceso al principio de tu compromiso, te sorprenderás del progreso que has hecho para el día de la boda.
Coma, beba y duerma bien
Probablemente has escuchado este consejo un millón de veces. Coma una dieta equilibrada y saludable. Bebe mucha agua. Duerma ocho horas cada noche. Lo has escuchado tantas veces que probablemente entre en un oído y salga por el otro. ¡Pero escuchen! Hay una razón por la que tanta gente (tu médico, tus amigos, tu madre) quiere que sigas este consejo: funciona.
Obviamente, una dieta equilibrada y dormir lo suficiente no resolverá todos tus problemas, pero puede ayudarte a sentirte mejor de forma regular. Y cuando planeas una boda, necesitas sentirte lo mejor posible; ¿de qué otra manera podrás comprar un vestido de novia, hacer 200 favores de bricolaje y seguir con tu trabajo diario?
Un poco de indulgencia aquí y allá está bien (¡traigan las degustaciones de pasteles!), pero una pareja sana, hidratada y bien descansada tendrá mucho más fácil planear la boda de sus sueños.
Ejercicio para su vestido
Muchas novias (y novios) sienten la necesidad de ponerse en forma antes de su gran día. Entiendo el atractivo: estas fotos estarán con ustedes para siempre; ¡probablemente se las mostrarán a sus nietos algún día! Es natural querer parecerse a una supermodelo. Sin embargo, la realidad es que muchos de nosotros no tenemos el tiempo o los recursos necesarios para conseguir nuestros cuerpos de ensueño para el gran día.
¿Significa esto que deberías renunciar totalmente a ir al gimnasio? ¡No puede ser! En vez de eso, concéntrate en los pequeños cambios que puedes hacer antes de la boda. Una forma de hacerlo es diseñando tu entrenamiento en torno al aspecto del día de la boda.
¿Llevas un vestido sin espalda? Concéntrate en ejercicios que tonifiquen tu espalda y tus hombros. ¿Tu vestido está abrazando tus curvas? Juega con tus activos con muchas sentadillas para definir esa figura. No sólo tu vestido se verá mejor que nunca, ¡sino que también estarás en camino a una gran rutina de ejercicios!
Concéntrate en el control del estrés
No es ningún secreto que planear una boda puede ser estresante. Hay mucho que hacer, muchas opiniones con las que lidiar, y mucha presión sobre el producto final. Todo el estrés puede absorber la diversión de la planificación de la boda, por lo que el control del estrés debe ser una prioridad para cada pareja comprometida.
Hagas lo que hagas, asegúrate de no dejar que la planificación de la boda se apodere de tu vida. Planifica una cita semanal en la que toda la conversación sobre la boda esté fuera de los límites. Utiliza la meditación o las técnicas de respiración profunda para evitar las ansiedades que se arrastran mientras planeas. Invierte en masajes una vez al mes si eso es lo tuyo. Si puedes dejar de lado todas tus preocupaciones, puedes encontrar que la planificación de la boda es realmente muy divertida.
Mientras planeas tu boda, recuerda: esta fiesta es sólo un día de tu vida con tu amor. ¿Debería ser un día divertido y hermoso? ¡Claro que sí! Pero no debe ser un día que te haga sacrificar tu bienestar físico o mental. Asegúrate de poner tu salud y la de tu relación en primer lugar; tu boda será mejor para ello.