La historia de Cupido

Al igual que Papá Noel o el Ratón Pérez, Cupido se ha convertido en una criatura icónica y mítica que representa un par de cosas específicas: el amor y el día de San Valentín. Aunque vemos con frecuencia a este personaje familiar ilustrado en tarjetas de felicitación, en la televisión y en otros lugares de la cultura pop, muy poca gente sabe cómo llegó Cupido a representar la emoción del amor y a ser un icono en el mundo actual. La historia de este simpático querubín es muy larga y merece la pena conocerla para celebrar el amor y el día de San Valentín.

La mitología de Cupido

Los orígenes de Cupido se remontan a la antigüedad, ya que forma parte de la mitología desde hace siglos. En la mitología romana, se le consideraba hijo de Venus, que era la diosa del amor. El nombre de Cupido en este caso se traduce como "desear", lo que es un significado apropiado, incluso en la actualidad. El mito afirma que Cupido se enamoró perdidamente de Psique, aunque su madre estaba verde de envidia por la belleza de Psique. Aunque los dos estaban casados, Cupido ordenó a Psique que no le mirara nunca y sólo la visitaba por la noche. Después de que las hermanas de Psique la convencieran de que debía mirar a su marido, lo hizo encendiendo una lámpara durante una de sus visitas nocturnas. Entonces él la abandonó, lo que llevó a Psique a buscar a Cupido durante bastante tiempo.

Finalmente, la búsqueda de Psique la llevó al templo de Venus. Allí, Venus buscaba destruirla y le exigía difíciles tareas, una tras otra. El último desafío exigía que entregara una caja al inframundo, recogiendo parte de la belleza de Proserpina. Al darle las instrucciones, se le advirtió que no abriera la caja bajo ninguna circunstancia. Sin embargo, no pudo resistirse y abrió la caja. Una vez que lo hizo, descubrió que la esperaba un sueño mortal.

Al darse cuenta de su verdadero amor por Psique, Cupido se encontró con su cuerpo sin vida. La perdonó por desobedecerle y mirarle en la noche. Volvió a meter ese letargo mortal en la caja y ella resucitó. Psique se convirtió entonces en una diosa romana.

Para contrarrestarlo, en la mitología griega Cupido tenía una identidad diferente. Se le conocía como Eros y era hijo de Afrodita. El mito griego no es tan profundo, ya que se cree que Cupido -o Eros- fue un dios primordial que vino a la tierra desde un huevo, o que nació de Afrodita a la antigua usanza.

Datos sobre Cupido

Hay muchos hechos poco conocidos sobre Cupido que lo convierten en un personaje aún más interesante.

El amor es ciego

En algunas representaciones de Cupido, el personaje lleva una venda en los ojos. ¿Por qué? Como dice el refrán, "el amor es ciego".

Arco y flecha

Es famoso que Cupido lleve un arco y una flecha. Sin embargo, se dice que no tiene un arco y flechas, sino dos. El primero -y el más comúnmente considerado- tiene una punta de oro. Cuando golpea a las personas con estas flechas, las enamora. Su otro juego es de plomo o plata y tiene una punta roma. Estas flechas son las responsables de que su pareja se desenamore. En la mitología, Cupido podía utilizar estas flechas tanto en humanos como en dioses, golpeándolos y haciendo que se enamoraran o desenamoraran en un instante.

El pañal de Cupido

En las representaciones actuales de Cupido, que suelen ser dibujos animados, lleva un pañal. Sin embargo, en la mayoría de las representaciones artísticas e históricas de este personaje, está desnudo. Se dice que esto se debe a que el amor no tiene nada que ocultar y es inocente y puro, como la propia emoción. Así que, tal vez se pregunte, ¿cómo acabó llevando un pañal infantil? Pues bien, la única razón que se puede encontrar para ello es promover el pudor y facilitar que este personaje se muestre en público tal y como es.

La Bella y la Bestia

Muchos creen que el cuento actual de La Bella y la Bestia es una réplica del famoso cuento de Cupido y Psique. Si es cierto o no, es algo que se debate, pero sin duda es una teoría que existe.