6 Tradiciones de la ceremonia de boda que incluyen a tu familia
A menudo se dice que las bodas giran en torno a los novios: es su día. Aunque es cierto que el motivo principal de la ocasión es el matrimonio de dos personas, las familias también desempeñan un papel importante en el gran día. Desde ayudar a planificar y pagar las facturas hasta escuchar y ofrecer apoyo durante el estresante proceso, las familias son algo que hay que agradecer y honrar durante un momento de emoción nupcial. He aquí algunas tradiciones de la ceremonia que puedes personalizar para honrar a tus seres queridos durante la celebración.
Escolta nupcial
Una de las tradiciones familiares ceremoniales más conocidas es que la novia sea acompañada al altar por su padre. Esto tiene su origen en la histórica "transferencia de responsabilidad" del padre al novio por el bienestar de la novia. Históricamente, las novias estaban a cargo de sus padres hasta que se casaban. Ahora, como sociedad, hemos avanzado mucho y ya no vemos a las mujeres como un pasivo financiero (¡menos mal!), pero la tradición sigue siendo una de las más populares. Es una bendición simbólica que la familia de la novia transmite a su cónyuge. El "bendecidor" puede ser cualquiera que haya desempeñado un papel significativo en su vida, sobre todo si el padre no ha estado presente o ha fallecido. Una madre, un tío o incluso un amigo íntimo pueden tener el honor de acompañar a la novia hasta el altar y dar la bendición por la unión.
La importancia de las madres
Es un gesto encantador dar a las madres un poco de crédito durante las ceremonias matrimoniales. Tradicionalmente, el padre de la novia escolta a su madre por el pasillo antes de dar la vuelta para escoltar a la novia, pero cualquier persona que designes puede desempeñar ese papel. No dudes en incluir también a la madre del novio. Las bodas son especialmente importantes para las madres, que a menudo han trabajado duro para que el gran día saliera a pedir de boca. Es bueno reconocerles su mérito.
La fiesta nupcial
Una tradición muy arraigada es la del cortejo nupcial, que sigue teniendo un papel importante en la ceremonia. Esta tradición tiene su origen en la época de los romanos, cuando las parejas supersticiosas pensaban que necesitaban protección y apoyo para ahuyentar a cualquier cosa o persona que pudiera impedir el matrimonio. Hoy en día, esta tradición es bastante similar a sus raíces históricas. Las damas de honor y los padrinos son un grupo de personas elegidas para apoyar y ayudar a la pareja el día de la boda. Muchas veces, esto incluye a los miembros más cercanos de la familia, con una hermana como dama de honor o un hermano como padrino. Son las personas que estarán a tu lado en las buenas y en las malas y sin cuyo apoyo no podrías embarcarte en el viaje del matrimonio. Del mismo modo, se incluye a los miembros más jóvenes de la familia como floristas o portadores de anillos. Puede que estos jóvenes no ofrezcan mucho apoyo, ¡pero seguro que se sienten especiales cuando se les elige para ese papel!
Asientos reservados
No hace falta decir que los miembros de la familia deberían tener asientos preferentes en las bodas, pero no siempre es así. Reservar las dos primeras filas a ambos lados del pasillo podría considerarse más bien un consejo de etiqueta, pero también debería considerarse una tradición. A los invitados les encanta tener un buen asiento en las ceremonias matrimoniales, así que si no hay carteles de reserva, podrías correr el riesgo de revolver a los invitados para que la abuelita consiga su asiento. Merece la pena darle prioridad, aunque no sea la tradición más emocionante.
Ceremonias de la unidad
Las ceremonias de unión son una forma estupenda de celebrar la unión de dos familias en una. La ceremonia simboliza que los novios ya no son individuos, sino que se han unido en una sola familia. Esta tradición en particular incluye a los miembros de la familia en un nivel más íntimo. Resulta especialmente agradable para las parejas que proceden de distintos orígenes o para las que tienen hijos antes del matrimonio y se están integrando en los nuevos roles familiares. Algunas formas populares de realizar estas ceremonias utilizan arena, velas, agua o incluso pintura como medios para combinar. Los productos finales son recuerdos preciosos que pueden conservarse como recuerdo del compromiso de todos con la unión.
Conmemoraciones
A veces, no todos los miembros de la familia pueden estar presentes en la ceremonia. Algunos ya han fallecido, pero siguen siendo piezas importantes de la familia. Para honrar a esas figuras especiales, se puede colocar una rosa en un asiento de la ceremonia para simbolizar su presencia. En lugar de una flor, pueden utilizarse otros objetos, como una pequeña foto enmarcada, un recuerdo personal, como un reloj o una joya, o incluso un pequeño poema conmemorativo. Esta tradición ceremonial especial puede infundir mucho consuelo en un momento de emociones intensas.
Incluir a su familia en cualquiera de las tradiciones anteriores sirve para honrar a sus seres queridos y agradecerles su apoyo. Aunque no todas las familias son iguales, todos tenemos personas especiales en nuestras vidas que nos quieren y nos apoyan continuamente. Es un gesto encantador hacer partícipes a estas personas de tu día especial para expresarles tu gratitud. Seguro que el guiño no se olvidará pronto.