Cómo ser inteligente con las redes sociales Inspiración para bodas

Las redes sociales son una gran fuente de influencia para los futuros casados. Esto es algo bueno y malo a la vez. Por un lado, las redes sociales dan acceso a fuentes de inspiración casi ilimitadas sin mucho esfuerzo. Por otro lado, en ocasiones puede ser perjudicial para el proceso de planificación de la boda, que ya es probablemente estresante.

Así que, antes de recurrir a Instagram, Pinterest, Facebook o cualquier otra red social en busca de inspiración para la boda, ten en cuenta los siguientes consejos. Así aprovecharás al máximo los beneficios de las redes sociales sin complicarte accidentalmente las cosas.

Las cosas no son siempre lo que parecen

Esto ya debería ser obvio para ti. Todos sabemos que las redes sociales están llenas de publicaciones y fotos en las que las cosas se ven mucho mejor que en la realidad. Y esto significa todo, no sólo las fotos de personas retocadas o filtradas. Los lugares pueden parecer más grandes, más brillantes o más modernos; todo lo que necesitas es un buen ángulo con una buena iluminación. Los arreglos florales pueden no ser tan coloridos en la vida real. Los vestidos suelen estar sujetos con alfileres o ajustados a la modelo. La lista continúa. Así que la lección más importante es tomar siempre todo lo que veas con un grano de sal.

Limitar las cosas

Hay millones de publicaciones en las redes sociales sobre bodas. ¿No sabes por dónde empezar? Una vez que tengas una idea de lo que quieres o no quieres, haz una lista de lo que te interesa y encuentra los hashtags adecuados. Por ejemplo, tal vez te interesen las bodas en la playa, las rosas y los peinados con trenzas. Toma nota de los hashtags que se aplican y empieza a seguirlos. Esto no sólo te ahorrará tiempo, sino que evitará que te sientas abrumada.

Mira las bodas reales

En lugar de mirar las publicaciones de los proveedores, busca fotos de parejas reales. Mejor aún, busque fotos sinceras tomadas por un fotógrafo no profesional, ya que obtendrá una visión más auténtica de la escena. Además, no tengas miedo de enviar mensajes a la gente para preguntarles sobre cualquier cosa que te llame la atención: puede que acabes aprendiendo algo útil.

No seas un imitador

Otra cosa que debes recordar es que estás utilizando las redes sociales para inspirarte, no como un catálogo de compras. Aunque puede que veas algunas cosas que quieras imitar, nunca intentes copiar todo al pie de la letra. Al fin y al cabo, es tu día especial, así que hazlo tuyo.

Obtén una perspectiva diferente

Siempre que encuentres algo que te llame la atención, averigua qué es exactamente lo que te gusta (o no) de ello. Luego, compártelo con el vendedor correspondiente. Por ejemplo, si ves un bonito arreglo floral, pregúntate si es la combinación de colores, las flores en sí o algo más lo que te llama la atención. Esto te ayudará a centrarte en tu visión de la boda, dejando al mismo tiempo al proveedor cierto margen de creatividad. Cuando trabajes con tu proveedor, podrá adaptar el arreglo específicamente a tu gran día.

Ten en cuenta que tu visión puede cambiar con el tiempo, así que no dudes en actualizar a tus proveedores sobre la marcha. Dicho esto, esto no significa que debas cambiar de ideas todo el tiempo, sino que está perfectamente bien ver cómo evoluciona tu visión a medida que pasa el tiempo y te haces una mejor idea de cómo quieres que sea tu boda.

No tengas grandes expectativas

A muchos proveedores no les gustan las redes sociales por la razón que mencionamos al principio. Las cosas siempre parecen mejores en las fotos que en la realidad y los recién casados siempre esperan que cualquier proveedor pueda hacer una réplica exacta de cualquier escena. Esto no es cierto y puede ser muy frustrante. Esto nos lleva al último y más importante punto. Al final del día, incluso si haces todo lo posible para tratar de hacer las cosas perfectas, habrá detalles que se salgan un poco de la línea. Y créenos, todas las bodas tienen sus fallos, a pesar de lo que se muestre en las redes sociales. Lo más importante es que no compares tu día especial con el de los demás y que no te decepciones cuando las cosas no salgan perfectas.